¡A Baracoa me voy!

“¡Baracoa! ¿La playa habanera o…?”, preguntan con incredulidad casi todos (desconocidos, colegas y familiares) cuando les contamos de la próxima expedición de la plataforma Senti2Cuba, que dará inicio este viernes 12 de septiembre y se extenderá una semana.

La expresión cambia a una mezcla de asombro, pánico y hasta envidia cuando aclaramos que es la otra, sí: la primada de Cuba; la ciudad nororiental a donde hay que “ir”, no “pasar”; la cuna del chorote, los cucuruchos y los bacanes… con el añadido apasionante de subir (¡y bajar!) La Farola, una de las joyas de la ingeniería cubana.

Esta vez el fernandeo se duplica: no vamos 12, como a la Isla, sino 24, y allá se nos suma otra nativa, Ñañita (una profe con talla S de cuerpo y XL de gozadera), así seremos 25, como los años de Sexo sentido.

También habrá representantes de más provincias: la capital, Matanzas, Villa Clara, Sancti Spíritus, Ciego de Ávila y la anfitriona Guantánamo. Y Camagüey, claro, pero porque se suma Adrián, el geofotorreportero estrella… a la artista maléfica decidimos dejarla plantada (luego de recoger el maní y las cremitas, como combustible para el resto del camino).

No nos juzguen mal: todavía no llega el día del viaje y ya hubo desconexión del SEN y amenaza de ciclón en oriente. ¿Qué más prueba necesita Rubiera para contratarla como predictora de desastres?

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En estos días acamparemos a la orilla del Duaba, subiremos El Yunque, visitaremos el Toa, bogaremos en chalupas por el Yumurí y dejaremos nuestra ofrenda en el Miel. No es todo lo que puede hacerse en plan turismo ecológico en esa bella zona, pero es muchísimo, y se lo debemos a la pasión de una pareja que decidió apadrinarnos desde que se enteró del proyecto, y llevan un mes dando carreras y co-inspirando coterráneos para que todo salga bien.

Delvis tiene la voz tranquila, paternal; provoca confianza en que todo es posible, y que en sus guaguas de Transporte Escolar se puede llegar hasta la Luna, si se les pide con cariño. La colega radial Mirna es el fuego de un hogar, el desborde de un río que cala todo y nutre a su alrededor, segura de que ese esfuerzo dará buena cosecha.

Ambos tienen algo que los sintonizó de inmediato con Senti2Cuba: fe en el mejoramiento humano y en la virtud martiana. Por eso entienden nuestro afán de conectar almas y ayudar a otros a recorrer las venas del país, para entender qué defendemos, por quienes y por qué.

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Entre paseo y paseo estarán nuestros talleres, ferias y visitas a instituciones de Salud. De la mano de los anfitriones conoceremos las comunidades de Mabujabo y Yumurí, jugaremos con chicos de un barrio citadino y armaremos gran revuelo en el pre de la calle y la secundaria vecina.

Con gran ilusión entregaremos a los inquilinos de la Casa de Abuelos, las protegidas del Hogar Materno y todos los sitios que nos acojan pequeñas muestras de afecto solidario, como la ropa recogida en nuestras familias y los útiles elaborados con la vibra de varios expedicionarios, de la increíble Maité y su (mi) familia espirituana y de dos niñas, Oli y Leo, que regalaron parte de sus vacaciones a este loquísimo sueño fomentar la memoria afectiva.

Cada postal, abanico, pulsera, lacito, cartuchera, pañito, amigurumi (y más) es un aleteo de ternura: un tiempo dedicado al servicio, a la paz, a poner colorido sobre el gris de los tiempos difíciles.

Por cierto, no vamos solos esta vez: por la Fundación El Arte de Vivir se suma Katia, una de las instructoras cubanas; por la iniciativa Copas para Cuba irá la doctora Thailí, y por la Tecla del duende, de JR, van Arminda y Eglys.

Y para hacer el viaje más divertido (y desafiante) estarán Diana, Diego, Amaya y Edgar. ¡Ya extrañaba viajar con corazones nuevos y cabecitas revoltosas!

La semana que viene te cuento del resto del piquete. Y prometemos fotos: de las serias y emotivas hasta las picarescas, porque con estas lluvias, esa bajada del Yunque promete ser todo un fanguizal…